Una labor más entretenida que, además, puede dar un toque de originalidad y personalidad al producto que vayamos a entregar es una figura para incluir en el paquete o para decorar el envoltorio. Pequeños detalles que marcarán la diferencia.
Una de las formas más sencillas de ornamentar nuestros presentes es, sobre el papel de envoltorio, colocar un pequeño muñeco hecho en fieltro y relleno con algodon. Las posibilidades son casi infinitas, tan sólo necesitamos pensar qué queremos crear. A partir de aquí, cortamos dos trozos simétricos previamente dibujados en papel y llevados a la tela posteriormente.
Una vez recortados los coseremos dejando una pequeña abertura para poder rellenar con el material que más nos convenga, algodón, guata, lana, etc. A continuación cerramos el orificio con puntada invisible o, en muchas ocasiones, llamativos colores que complementen la obra.
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